- Dime, ¿qué te pasa?
- ¿A mi? A mi nada.
- Vamos, Sol, estás rarísima. Oye, dímelo, acabamos de arreglarlo y no quiero volver a pelearme contigo, me importa todo lo que te pase a ti. Igual puedo ayudarte..
- No quiero caer en lo mismo de siempre, Mark.
- ¿Qué?
- Ya te lo he dicho, no quiero cometer el mismo error.
- Expecifica.
- No quiero quererte, Mark. Otra vez no.
- ¿Que hago yo para que me quieras? No es mi intención, en serio, Sol.
- Lo sé, es lógico. Tú tienes novia, y la quieres...
- ...
- ¿No vas a decir nada más?
- No quiero cagarla. Otra vez no.
martes, 13 de abril de 2010
¿Alguna vez te has perdido en la inmensidad de sus ojos negros?
Etiquetas:
El chico de siempre,
Sol y sus dos chicos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Me he quedado impresionada cuando he leido tu descripcion sobre ti al entrar en tu blog... coincidimos en TODO, ABSOLUTAMENTE TODO (excepto lo de cotillear q no conozco ni a los de mi casa, y lo de q t llamen deboradora de libros...) y esto q te digo, no es el "tipico comentario", va en serio.
ResponderEliminarY sobre el texto, es muy real como la vida misma...
te sigo, vale?
Muak
Realmente, iba a decir algo casi igual a lo que ha dicho bixitoluminoso y también va en serio xDDDD
ResponderEliminarTe sigo (:
Un beso con sabor a Vainilla.
El amor a veces es injusto.... Muchas veces...
ResponderEliminara veces el amor es sobretodo complicado, muás
ResponderEliminar