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No puedes imaginar cuanto te quiero, ahora los relojes pararán. acercándote a mi pelo, y tu mirada otra vez...

martes, 5 de enero de 2010

Ten un poco de paciencia (IV)

- Lárgate de mi vida de una maldita vez.
- Vale, si eso es lo que tú quieres…
En ese momento Sol sientió una punzada fuerte en el corazón y, en su cabeza, una lucecita se encendió. Aun faltaba algo..
- Espera, se me olvida decirte feliz año nuevo, si no te lo digo ahora me quedaré con las ganas y como no pienso volver a hablarte será peor.
- Oye, ¿Lo haces a propósito o es que me quieres mucho?
- Déjame.
- Dímelo.
- Es que te quiero mucho..
- ¿Sí? ¿Entonces porque cojones hay otro?
- Tú nunca te enteras de nada, Mark. Solo ves lo que quieres ver. No hay otro, o quizá sí. Lo único que tengo claro es que hay otro en los momentos en los que tú eres tan gilipollas de hacerme daño. En los momentos en que él viene a salvarme del llanto y me da un abrazo. En los escasos segundos que me dura el enfado contigo. Después estas tú, siempre tú. Tú que eres un capullo y yo no soy capaz de querer a quien debería querer.
Silencio, no pasa nada. Sol mira la pantalla del ordenador, esperando, como siempre. Pasan los minutos y, al final, se cansa.
- ¿No vas a decir nada?
- ¿De qué?
- De lo que te acabo de decir.
- No tengo nada que decir.
- O sea, yo te digo que te quiero y que no hay otro y tú como si nada.
- Sol, déjalo ya ¿vale?
- No quiero.
- ¿No te das cuenta de que yo paso de ti? Eres tú la que vienes siempre a hablarme.
- ¡Eres un gilipollas!
Sol cierra de golpe el portátil e intenta reprimir el llanto. Escucha su nombre y se levanta respirando hondo. Sale al pasillo y de ahí al comedor, sacando su mejor sonrisa.
Sí, eso fue lo más duro para ella, sacar su mejor sonrisa cuando su corazón se retorcía de dolor. Fingir que todo estaba bien cuando lo único que quería era tirarse en la cama y llorar. Hacer como si nada, porque era año nuevo y estaba toda su familia en casa.

7 comentarios:

  1. Me puedo imginar a Sol, lo mal que lo pasas cuando dices te quiero, y no obtienes nada a cambio :(

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  2. lo mejor es tirarse a la cama y llorar, no queda otra opción.
    Beso.

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  3. estamos exactamente en lo mismo.
    Hay otro, cuando él se vuelve imbecil.

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  4. como siempre, él acaba haciendole daño...

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  5. Por eso me da tanta angustia, pero jamas se lo dije, se que se reiria en mi cara un poco mas... me iria peor que sol!
    y otra vez el termino haciendole daño! :$

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Sí, será un día lluvioso y no hay nada que podamos hacer para cambiarlo. Podemos rezar para que salga el sol, pero eso no parará la lluvia. Puedo ser tu refugio hasta que termine, por favor no pares la lluvia. Déjala caer, déjala caer, déjala caer. Por favor, no pares la lluvia.