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No puedes imaginar cuanto te quiero, ahora los relojes pararán. acercándote a mi pelo, y tu mirada otra vez...

viernes, 19 de febrero de 2010

Dime Sol, ¿ahora que va a pasar?

- Fui una estúpida. Una completa estúpida. Debería haber entendido desde el principio que era su historia y no la mía. Que era una historia de Ellos, no de Nosotros. Que yo no estaba metida, ni involucrada, simplemente era una carta guardada para conseguir un propósito. Debería haber sabido que ellos se querían. A pesar de que ella saliese con veinte mil tíos menos con él. A pesar de que él me prometiese el mundo, y las sonrisas de todos los días. Él solo me quería para conseguirla a ella, ¿lo entiendes? Era solo un simple juego.
- ¿Lo consiguió?
- ¿A mi? No. No me consiguió. Lo intentó y si hubiese dado un solo paso más hacía donde yo estaba, me habría tirado en sus brazos sin dudarlo. Era cuestión de días, quizá incluso de varías horas a su lado.
- ¿Entonces?
- Entonces salió el rumor. El estúpido rumor que terminó con todo. La gente habla mucho, ¿sabes? Y en seguida se extendió por ahí que yo me había liado con él.
- ¿Él lo dijo?
- No. O sí. No lo sé. ¿Debería creerle si me dice que fue otra persona? Lo hice, le creí cuando me lo explicó todo. Y volví a caer en la trampa otra vez. Es verdad que nunca sabré por seguro si la persona que lo empezó todo fue su amiga, que ya había difundido otras cosas sobre mi, o si fue él. Porque ¿si no fue él, no es mucha casualidad que después de esto la haya conseguido a ella?
- Quizá..
- No. Yo la conozco, igual no hasta el fondo, pero sé lo suficiente. Se murió de celos al darse cuenta que ese que siempre había estado adorándola como si fuese su criado se había ido con otra. No lo soportó y ese día se enfadó tanto… Pero aun así no lo soltó. No dejó que él se acercase a mi para explicarme las cosas y, a él tampoco parecía importarle que yo estuviese enfadada.
- ¿Te enfadaste?
- Sí. O eso creía por las noches dando vueltas por la cama, los veía juntos en mi mente, todo el rato, y me entraba una rabia y unas ganas de llorar incontrolables. Pero luego cuando lo tenía cerca no podía no contestarle si me hablaba, no mirarle si me miraba. Y eso, que desde lo del rumor las veces que lo había hecho se podían contar con los dedos de una mano.
- ¿Entonces ellos están juntos?
- No lo sé. Yo creo que sí, siempre que estaban juntos yo desviaba la mirada. No podía soportarlo.
- ¿Y al final?
- Al final nada, esta historia aun no tiene final. Supongo que aun tendré que aclarar las cosas con Él, y ver que pasa con ellos, o con nosotros. Aunque ya te lo he dicho, mi corazón me dice que solo fui un peón en su tablero de ajedrez. Y entonces solo podré quitarme de en medio.
- ¿A pesar de todo lo que te ha dicho Él? ¿A pesar de lo que te ha hecho creer?
- Sí, a pesar de todo..

3 comentarios:

  1. Se me olvidaba comentar que la forma de explicar las cosas en una conversación así, esta sacada de uno de los textos del blog: ''El cuento de la estrellita perdida''.
    Lo digo para que no hayan confunsiones de ningun tipo.
    Gracias :)

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  2. Yo creo que El la quiere, pero que se ha liado la cabeza..
    tiempo al tiempo.
    Un besoo

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  3. es una manera excelente de explicar una conversación. Es atrapante.
    Veremos como finaliza todo esto!
    un saludo enorme!

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Sí, será un día lluvioso y no hay nada que podamos hacer para cambiarlo. Podemos rezar para que salga el sol, pero eso no parará la lluvia. Puedo ser tu refugio hasta que termine, por favor no pares la lluvia. Déjala caer, déjala caer, déjala caer. Por favor, no pares la lluvia.