- Te quiero.
- Lo sé, pero eso no basta.
- ¿De verdad es necesario que te vayas así? Quedaté, prometo no agobiarte. Dejarte toda la libertad que necesites...
- No. Tengo que irme. Las cuerdas que me atan a ti me estan ahogando y no puedo respirar. No es tu culpa, amor.
Y Ella se alejó con el llanto entre los pulmones, mientras Él, se quedaba con un corazón encogido y roto en la mano.
domingo, 6 de junio de 2010
Te avisé que de que te iba a hacer daño y no quisiste escucharme...
Etiquetas:
Sophie.,
Ven que te cuente un cuento.
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T___T
ResponderEliminarLa libertad es algo muy preciado, y es complicado cuando una persona te pone barreras.
ResponderEliminar¡Un beso!
Si le ahogaban, seguramente siguieran haciéndolo si se quedara, aunque él le prometiese lo contrario.
ResponderEliminar¡Un besazo!